domingo, 30 de septiembre de 2018

TEFILA ANTES DE ESTUDIAR KABBALA


TEFIL´LÁ ANTES DE ESTUDIAR KABBALÁ  

En aras de la unificación del Santo, Bendito Sea Él, y su Shejiná (Presencia Divina) en el temor y amor y el amor y temor, en aras de la unificación de las letras Iúd y Hé con Vav y Hé y (por la energía de la Luz del Én Sóf (Infinito) que las refuerza y las une) en una perfecta unidad, en el nombre de todo Israel. Y en aras de elevar a la Shejiná (la Divina Presencia) del polvo. Ahora estoy dispuesto a estudiar la Kabbalá, que corresponde a Tiféret del Mundo de Atzilút, que se relaciona con el nombre  יוד הא ואו הא   MaH (45). HaShém, qué Tu Merkavá/carruaje pueda ser favorecido ante Ti. Ado-nái, nuestro Di-s, y Di-s de nuestros padres, que purifiques nuestro espíritu y alma y que puedan levantar las aguas femeninas inferiores para nuestro aprendizaje de la Kabbalá. “Y que el agrado de nuestro Ado-nái este sobre nosotros, que Él establezca la obra de nuestras manos (arriba), las obras de nuestras manos (abajo) se establezcan. “Bendito eres Tú Señor por siempre y siempre. Amén. Selah, Nétzaj. 

 

SÉDER PARA LA CEREMONIA DE BERÍT MILÁ (circuncisión) - HEBREO-FONÉTICA-ESPAÑOL


SÉDER PARA LA CEREMONIA DE BERÍT MILÁ (circuncisión)

Constituye una obligación decretada por la Torá que el padre circuncide a su hijo en el octavo día de su nacimiento. A pesar de que se puede circuncidar durante todo el día, es preferible hacerlo desde la salida del sol hasta el mediodía. Se acostumbra que el Sandák (la persona que sostiene al niño) se sumerja en una mikvé antes de la circuncisión. Se designa verbalmente una silla para que sea “Kissé shel Eliáhu - La Silla de Elías”.

Durante la circuncisión hay que permanecer de pie. El banquete debe ser llevado a cabo el mismo día. Cuando el niño es traído a la sinagoga para circuncidarlo, todos los presentes se levantan y dicen:

בָּרוּךְ הַבָּא בְּשֵׁם יְהֹוָה

BARÚJ  HÁBBA  BESHÉM  ADO-NÁI

Bendito el que viene en Nombre de HaShém.

CUANDO EL PADRE TOMA AL NIÑO EN SUS MANOS, DICE:

שָׂשׂ אָנֹכִי עַל־אִמְרָתֶךָ כְּמוֹצֵא שָׁלָל רָב

SÁS  ÁNOJI  ÄL-IMRATÉJA  KEMOTZÉ  SHALÁL  RÁV

Me regocijo por tu enunciado, como quien halla un gran botín.

זִבְחֵי אֱלֹהִים רוּחַ נִשְׁבָּרָה לֵב‎‏־נִשְׁבָּר וְנִדְכֶּה אֱלֹהִים לֹא תִבְזֶה

ZIVJÉ  ELO-HÍM  RÚAJ  NISHBARÁH  LÉV-NISHBÁR  VENIDKÉH  ELO-HÍM    TIVZÉH

Los sacrificios de Di-s son el espíritu quebrantado; al corazón contrito y humillado no despreciarás Tú, oh Di-s.

הֵיטִיבָה בִרְצוֹנְךָ אֶת־צִיּוֹן תִּבְנֶה חוֹמוֹת יְרוּשָׁלִָם

HETÍVAH  VÍRTZONEJA  ET-TZÍON  TIVNÉH  JOMÓT  IERUSHALAÍM

Haz bien con tu voluntad a Sion; edifica los muros de Jerusalén.

אָז תַּחְפֹּץ זִבְחֵי־צֶדֶק עוֹלָה וְכָלִיל אָז יַעֲלוּ עַל־מִזְבַּחֲךָ פָרִים

ÁZ  TAJPÓTZ  ZIVJÉ-TZÉDEK  ÖLÁH  VEJALÍL  ÁZ  IAÄLÚ  ÄL-MIZBAJAJÁ  FARÍM

Entonces te agradarán los sacrificios de justicia, el holocausto u ofrenda del todo quemada; entonces ofrecerán sobre tu altar becerros.

אִם־אֶשְׁכָּחֵךְ יְרוּשָׁלִָם תִּשְׁכַּח יְמִינִי

ÍM-ESHKAJÉJ  IERUSHALÁIM  TISHKÁJ  IEMINÍ

Si me olvido de ti, oh Jerusalén, pierda mi diestra su destreza.


תִּדְבַּק־לְשׁוֹנִי לְחִכִּי אִם־לֹא אֶזְכְּרֵכִי אִם־לֹא אַעֲלֶה אֶת־יְרוּשָׁלִַם עַל רֹאשׁ שִׂמְחָתִי

TIDBÁK-LESHONÍ  LEJIKKÍ  IM-LÓ  EZKERÉJI  IM-LÓ  ÁÄLEH  ET-IERUSHALAÍM  ÄL  RÓSH  SIMJATÍ

Mi lengua se pegue a mi paladar, si de ti no me acordare; si no ensalzare a Jerusalén como preferente asunto de mi alegría.

שְׁמַע יִשְׂרָאֵל יְהֹוָה אֱלֹהֵינוּ יְהֹוָה אֶחָד

SHEMÁ  ISRAÉL  ADO-NÁI  ELO-HÉNU  ADO-NÁI  EJÁD

Oye, Israel: el Eterno, nuestro Di-s, el Eterno es Uno.

יְהֹוָה מֶלֶךְ יְהֹוָה מָלָךְ יְהֹוָה יִמְלֹךְ לְעֹלָם וָעֶד

ADO-NÁI  MÉLEJ  ADO-NÁI  MALÁJ  ADO-NÁI  IMLÓJ  LEÖLÁM  VAËD

¡HaShém reina, HaShém reinó, HaShém reinará por siempre jamás!

אָנָּא יְהֹוָה הוֹשִׁיעָה נָּא

ANNÁ  ADO-NÁI  HOSHÍÄH   

Te rogamos, oh Señor, sálvanos ahora. (X 2)

אָנָּא יְהֹוָה הַצְלִיחָה נָּא

ANNÁ  ADO-NÁI  HATZLIJÁH 

Te rogamos, oh Señor, prospéranos ahora. (X 2)


LUEGO EL PADRE RECITA EL VERSÍCULO:

אַשְׁרֵי תִּבְחַר וּתְקָרֵב יִשְׁכֹּן חֲצֵרֶיךָ

ASHRÉ  TIVJÁR  UTKARÉV  ISHKÓN  JATZERÉJA

Dichoso el que Tú escogieres, e hicieres llegar para que habite en tus atrios;

LOS PRESENTES RESPONDEN:

נִשְׂבְּעָה בְּטוּב בֵּיתֶךָ קְדֹשׁ הֵיכָלֶךָ

NÍSBEÄH  BETÚV  BETÉJA  KEDÓSH  HEJALÉJA 

Se saciará del bien de tu Casa, de tu santo templo.


EL PADRE DEL NIÑO PROCEDE A RECITAR LA BENDICIÓN, ESTANDO DE PIE

בִּרְשׁוּת מוֹרַי וְרַבּוֹתַי

BIRSHÚT  MORÁI  VERABBOTÁI

Con su permiso, mis señores y maestros:

בָּרוּךְ אַתָּה יְהֹוָה אֱלֹהֵינוּ מֶלֶךְ הָעוֹלָם, אֲשֶׁר קִדְּשָׁנוּ בְמִצְוֹתָיו וְצִוָּנוּ לְהַכְנִיסוֹ בִּבְרִיתוֹ שֶׁל אַבְרָהָם אָבִינוּ

BARÚJ  ATTÁH  ADO-NÁI  ELO-HÉNU  MÉLEJ  HAÖLÁM, ASHÉR  KIDDESHÁNU  VEMITZVOTÁV  VETZIVVÁNU  LEHAJNISÓ  BIVRITÓ  SHEL  AVRAHÁM  AVÍNU

Bendito eres Tú, Señor, nuestro Di-s, Rey del Universo, que nos ha santificado con Sus mandamientos y nos ha ordenado hacerlo ingresar en el pacto de nuestro padre Abraham.

LA CONGREGACIÓN Y EL MOHÉL RESPONDEN:

כְּשֵׁם שֶׁהִכְנַסְתּוֹ לַבְּרִית, כָּךְ תַּכְנִיסֵהוּ לַתּוֹרָה וְלַמִּצְוֹת וְלַחֻפָּה וּלְמַעֲשִׂים טוֹבִים

KESHEM  SHEHIJNASTÓ  LABERÍT, KÁJ  TAJNISEHU  LATTORÁH  VELAMMITZÓT  VELAJUPPÁH  ULMAÄSÍM  TOVÍM

Así como la has hecho ingresar al pacto, que así también tengas el mérito de hacerlo ingresar en la Torá, en los mandamientos, en el palio nupcial y en las buenas acciones.

EL SANDÁK SE SIENTA EN LA SILLA Y COLOCA AL NIÑO SOBRE SUS RODILLAS. ENTONCES EL MOHÉL DICE LA SIGUIENTE FRASE:

זֶה הַכִּסֵּא שֶׁל אֵלִיָּהוּ הַנָּבִיא מַלְאַךְ הַבְּרִית זָכוּר לַטּוֹב

ZÉH  HAKKISSÉ  SHEL  ELIÁHU  HANNAVÍ  MALÁJ  HABBERÍT  ZAJÚR  LATTÓV

Esta es la silla del profeta Elías, el mensajero del pacto, que sea recordado para bien.

ANTES DE PROCEDER A LA CIRCUNCISIÓN, EL MOHÉL RECITA LA SIGUIENTE BENDICIÓN:

בָּרוּךְ אַתָּה יְהֹוָה אֱלֹהֵינוּ מֶלֶךְ הָעוֹלָם, אֲשֶׁר קִדְּשָׁנוּ בְמִצְוֹתָיו וְצִוָּנוּ עַל הַמִּילָה

BARÚJ  ATTÁH  ADO-NÁI  ELO-HÉNU  MÉLEJ  HAÖLÁM, ASHÉR  KIDDESHÁNU  VEMITZVOTÁV  VETZIVVÁNU  ÄL  HAMMILÁH

Bendito eres Tú, Señor, nuestro Di-s, Rey del Universo, que nos ha santificado con Sus mandamientos y nos ha ordenado con respecto a la circuncisión.


DESPUÉS DE QUE EL MOHÉL EFECTUÓ LA CIRCUNCISIÓN, EL PADRE DEL NIÑO RECITA LA SIGUIENTE BENDICIÓN:

בָּרוּךְ אַתָּה יְיָ אֱלֹהֵינוּ מֶלֶךְ הָעוֹלָם, שֶׁהֶחֱיָנוּ וְקִיְּמָנוּ וְהִגִיעָנוּ לַזְּמַן הַזֶּה

BARÚJ  ATTÁH  ADO-NÁI  ELO-HÉNU  MÉLEJ  HAÖLÁM,  SHEHEJEIÁNU  VEKIIMÁNU  VEHIGIÄNU  LAZZEMÁN  HAZZÉH

Bendito eres Tú, Señor, nuestro Di-s, Rey del Universo, que nos ha hecho vivir, nos ha preservado, y nos ha hecho  llegar a este momento”

LA PERSONA DESIGNADA AL EFECTO TOMA EL VASO DE VINO Y DICE LA BENDICIÓN:

בָּרוּךְ אַתָּה יְיָ אֱלֹהֵינוּ מֶלֶךְ הָעוֹלָם בּוֹרֵא פְּרִי הַגֶּפֶן

BARÚJ  ATTÁH  ADO-NÁI  ELO-HÉNU  MÉLEJ HAÖLÁM  BORÉ  PERÍ  HAGGÉFEN

Bendito eres Tú, Señor, Di-s nuestro, Rey del Universo, creador del fruto de la vid.

LUEGO TOMA ESPECIAS AROMÁTICA Y PRONUNCIA LA BENDICIÓN:

בָּרוּךְ אַתָּה יְיָ אֱלֹהֵינוּ מֶלֶךְ הָעוֹלָם בּוֹרֵא מִינֵי בְשָׂמִים

BARÚJ  ATTÁH  ADO-NÁI  ELO-HÉNU  MÉLEJ HAÖLÁM  BORÉ  MINÉ  VESAMÍN

Bendito eres Tú, Señor, Di-s nuestro, Rey del Universo, creador de las especies fragantes.

בָּרוּךְ אַתָּה יְהֹוָה אֱלֹהֵינוּ מֶלֶךְ הָעוֹלָם, אֲשֶׁר קִדֵּשׁ יְדִיד מִבֶּטֶן וְחוֹק בִּשְׁאֵרוֹ שָׂם וְצֶאֱצָאָיו חָתַם בְּאוֹת בְּרִית קֹדֶשׁ, עַל כֵּן בִּשְׂכַר זוֹ אֵל חַי חֶלְקֵנוּ צוּרֵנוּ, צַוֵּה לְהַצִּיל יְדִידוּת זֶרַע קֹדֶשׁ שְׁאֵרֵנוּ מִשַּׁחַת לְמַעַן בְּרִיתוֹ אֲשֶׁר שָׂם בִּבְשָׂרֵנוּ, בָּרוּךְ אַתָּה יְהֹוָה כּוֹרֵת הַבְּרִית

BARÚJ  ATTÁH  ADO-NÁI  ELO-HÉNU  MÉLEJ  HAÖLÁM, ASHÉR  KIDDÉSH  IEDÍD  MIBBETÉN  VEJÓK  BISHERÓ  SAM  VETZE´ETZAÁV  JATÁM  BEÓT  BERÍT  KÓDESH, ÄL  KEN  BISJÁR   É´L  JÁI  JELKÉNU  TZURÉNU, TZAVVÉH  LEHATZTZÍL  IEDIDÚT  ZÉRA  KÓDESH  SHE´ERÉNU  MISHSHAJAT  LEMAÄN  BERITÓ  ASHÉR  SAM  BIVSARÉNU, BARÚJ  ATTÁH  ADO-NÁI  KORÉT  HABBERÍT

Bendito eres Tú, Señor, Di-s nuestro, Rey del Universo, que santificó al bien amado desde el vientre, y le puso la marca del decreto en su carne, y selló a su progenie con el sello del pacto sagrado. Por ello, en recompensa a esto, Di-s Viviente, Porción nuestra, Roca nuestra, ordena que se libre de la destrucción la bien amada descendencia santa de nuestra carne, en aras de Su pacto que puso en nuestra carne. Bendito eres Tú, Señor, que instituye el pacto.

אֱלֹהֵינוּ וֵאלֹהֵי אֲבוֹתֵינוּ קַיֵּים אֶת־הַיֶּלֶד הַזֶּה לְאָבִיו וּלְאִמּוֹ וְיִקָּרֵא שְׁמוֹ בְּיִשְׂרָאֵל (פְּלוֹנִי). יִשְׂמַח הָאִישׁ בְּיוֹצֵא חֲלָצָיו, וְתָגֵל הָאִשָּׁה בִּפְרִי בִטְנָהּ כָּאָמוּר: יִשְׂמַח־אָבִיךָ וְאִמֶּךָ וְתָגֵל יוֹלַדְתֶּךָ: וְנֶאֱמַר: וָאֶעֱבֹר עָלַיִךְ וָאֶרְאֵךְ מִתְבּוֹסֶסֶת בְּדָמָיִךְ וָאֹמַר לָךְ בְּדָמַיִךְ חֲיִי וָאֹמַר לָךְ בְּדָמַיִךְ חֲיִי: וְנֶאֱמַר: זָכַר לְעוֹלָם בְּרִיתוֹ דָּבָר צִוָּה לְאֶלֶף דּוֹר: אֲשֶׁר כָּרַת אֶת־אַבְרָהָם וּשְׁבוּעָתוֹ לְיִשְׂחָק: וַיַּעֲמִידֶהָ לְיַעֲקֹב לְחֹק לְיִשְׂרָאֵל בְּרִית עוֹלָם: הוֹדוּ לַיהוָה כִּי־טוֹב כִּי לְעוֹלָם חַסְדּוֹ: (פְּלוֹנִי) זֶה הַקָּטָן, אֱלֹהִים יְגַדְּלֵהוּ, כְּשֵׁם שֶׁנִּכְנַס לַבְּרִית כָּךְ יִכָּנֵס לַתּוֹרָה וְלַמִּצְוֹת וְלָחֻפָּה וּלְמַעֲשִׂים טוֹבִים. וְכֵן יְהִי רָצוֹן וְנֹאמַר אָמֵן

ELO-HÉNU  VELO-HÉ  AVOTÉNU  KAIÉM  ET־HAIÉLED  HAZZÉH  LEAVÍV  ULIMMÓ  VEIKKARÉ  SHEMÓ  BEISRAEL (PELONÍ). ISMÁJ  HAÍSH  BEIOTZÉ  JALATZÁV, VETAGUÉL  HAISHSHÁH  BIFRÍ  VITNÁH  KAAMUR: ISMÁJ-AVÍJA  VEIMMÉJA  VETAGUÉL  IOLADTÉJA: VENE´EMAR: VAE´ËVÓR  ALÁIJ  VAERÉJ  MITBOSÉSET  BEDAMÁIJ  VAÓMAR  LÁJ  BEDAMÁIJ  JAÍ  VAÓMAR  LÁJ  BEDAMÁIJ  JAÍ: VENE´EMAR: ZAJÁR  LEÖLÁM  BERITÓ  DAVAR  TZIVÁH  LE´ÉLEF  DÓR: ASHÉR  KARAT  ET-AVRAHÁM  USHVUÄTÓ  LEISJÁK: VAIAÄMIDÉHA  LEIAÄKÓV  LEJÓK  LEISRAEL  BERÍT  ÖLÁM: HODÚ  LAADO-NÁI  KI-TÓV    LEÖLÁM  JASDÓ: (PELONÍ) ZEH  HAKKATÁN, ELO-HÍM  IEGADDELEHU, KESHEM  SHENNIJNÁS  LABBERÍT  KAJ  IKKANÉS  LATTORÁH  VELAMMITZVÓT  VELAJUPPÁH  ULMAÄSÍM  TOVÍM. VEJÉN  IEHÍ  RATZÓN  VENOMÁR  AMÉN

Di-s nuestro y Di-s de nuestros padres, preserva a este niño para su padre y para su madre, y que sea llamado su nombre en Israel (se pronuncia el nombre del niño). Que este hombre se alegre con su progenie, y que esta mujer se regocije con el fruto de su vientre, tal como se declara: “Se alegrarán tu padre y tu madre, y se regocijara la que te dio a luz” (Mishlé 23:25). Y también se declara: “Pasé junto a ti y te miré revolcándote en tu sangre; y te dije: Por tu sangre vivirás. Y te dije: Por tu sangre vivirás” (Iejezkél 16:6). (Se toma un poco de vino con el dedo y se lo coloca en la boca del niño las dos veces que se dice “por tu sangre vivirás”.) Y también se declara: “Recordó Su pacto para siempre; la palabra que ordenó para mil generaciones, la cual había instituido para Abraham, y Su juramento a Isaac. Y lo estableció por estatuto a Jacob” (Tehil´lím/Salmos 105:8-10). “Alaben al Eterno, pues Él es bueno, pues para siempre es Su bondad” (ibíd. 118:1). Que Di-s haga que este pequeño (se dice el nombre del niño) sea grande. Así como ingresó al pacto, que así también ingrese en la Torá, en los mandamientos, en el palio nupcial y en las buenas acciones. Que tal sea Su voluntad, y digamos: Amén.

LUEGO SE DICE EL TEHIL´LÍM 128 Y DESPUÉS EL KADDÍSH IEHÉ SHELEMÁ


PIÚT (Poema litúrgico) PARA LA CIRCUNCISIÓN

יְהִי שָׁלוֹם בְּחֵילֵנוּ וְשַׁלְוָה בְּיִשְׂרָאֵל

IEHÍ  SHALÓM  BEJELÉNU  VESHALVÁH  BEISRAEL

Que haya paz en nuestros baluartes y tranquilidad en Israel.

בְּסִימָן טוֹב בֵּן בָּא לָנוּ בְּיָמָיו יָבֹא הַגּוֹאֵל

BESIMÁN  TÓV  BÉN   LÁNU  BEIAMÁV  IAVÓ  HAGGOÉL

Con buenos auspicios ha llegado un niño a nosotros; que en sus días llegue el redentor.
       
הַיֶּלֶד יְהִי רַעֲנָן בְּצֵל שַׁדַּי יִתְלוֹנָן

HAIÉLED  IEHÍ  RAÄNÁN  BETZÉL  SHAD-DÁI  ITLONÁN

Que el hijo sea lozano y resida bajo la sombra del Omnipotente.

וּבַתּוֹרָה אָז יִתְבּוֹנָן יְאַלֵּף דָּת לְכָל שׁוֹאֵל

UVATTORÁH  ÁZ  ITBONÁN  IEAL´LÉF  DÁT  LEJOL  SHOÉL

Así en la Torá meditará e impartirá instrucción a todo Israel. 


sábado, 29 de septiembre de 2018

LECTURA DEL ZOHAR PARA HOSHANA RABBA (El séptimo día de sukkót)


LECTURA DEL ZÓHAR PARA HOSHAÄNÁ RABBÁ (El séptimo día de sukkót) - (Sábado 29 septiembre 2018 en la noche)

Hay cuatro especies en la rama de la palmera (luláv), y son siete: tres mirtos, dos sauces, un luláv y un etróg. Con el trabajo de ellos, despiertan otros siete en lo alto, las siete Sefirót JaGáT NeHÍM: tres mirtos, opuestos a JaGáT; dos sauces, opuestos a NH (Nétzaj-Hód); un luláv opuesto a Iesód; y un etróg opuesto a Maljút – para impartir al mundo con diversas Bejinót (discernimientos/caminos/maneras/aspectos), impartidas desde las siete Sefirót.

A pesar de que la congregación de Israel, Maljút es en realidad siete Sefirót, ella es bendecida por todas las seis Sefirót por encima de ella, que son JaGáT NeHI (Jésed-Guevurá-Tiféret  -  Nétzaj-Hód-Iesód), y por la corriente profunda que la fuente extiende y cuyas aguas nunca dejan de fluir sobre las seis Sefirót, JaGáT NeHI. Asimismo, ella nutre a la hija, Maljút, pues debido a que Maljút es la hija del mundo superior, Biná y el mundo inferior ZA (Zéër Anpín), ella es bendecida por ellos en este despertar. Eso es porque cuando la congregación de Israel es bendecida por ellos, todos los mundos son bendecidos, recibiendo de ella, y por lo tanto rodean el altar en los siete días de Sukkót, pues el altar Maljút recibe de Biná y de ZA y la llenan con siete Sefirót a través de siete circunvalaciones (vueltas al altar).

Además, en el despertar, cuando se sostienen las cuatro especies, todas las seis Sefirót JaGáT NeHI son bendecidas con agua, es decir, con abundancia y están plenas. Todas ellas extraen de la fuente de las corrientes, que es la más profunda de todas, de Biná, para llevar al mundo, Por esta razón, todas las cuatro especies debe estar húmedas y no secas, pues la humedad alude a que están llenas de abundancia para extender las bendiciones al mundo. Esto es así porque los árboles del mirto, del sauce y de la palmera siempre están húmedos y sus hojas siempre están en el árbol, ya sea verano o invierno, y su tiempo de alegría se da en los siete días de Sukkót.

Esa fuerza, que fue designada sobre los árboles de las cuatreo especies, cada una de ellas toma las bendiciones de la alegría arriba solamente en ese momento. Y la alegría de todos arriba y la alegría de estos árboles abajo es enteramente durante los días de Sukkót. Asimismo, su despertar depende de esos santos del Rey, es decir, cuando las ramas de la palmera son sostenidas por Israel. Y cuando Israel las toma, todos despiertan en ese tiempo, y el mundo, Maljút, es bendecido para verter las bendiciones a este mundo.

Está escrito, “La voz del Señor está sobre las aguas; el Di-s de la gloria del trueno”. Se refiere a Abraham/Avrahám, la cualidad de Jésed. “La voz del Señor es poderosa”, se refiere a Itzják/Isaac, Guevurá. “La voz del Señor es majestuosa”, se refiere a Iaäkóv/Jacob, Tiféret. “La voz del Señor quebranta los cedros”, en Nétzaj. “La voz del Señor taja las llamas del fuego”, se refiere a Hód. “La voz del Señor estremece al desierto”, se refiere al justo, Iesód. “La voz del Señor hace que la cierva de a luz”, es Tzédek (justicia), Maljút. Todos crecen en el mar, que es Biná, y son regados con agua, por la abundancia de Biná, para crecer, como está escrito, “Un río fluye del Edén para regar el jardín”. Y todos esos despiertan bendiciones para el mundo con la poción que ellos bebieron.

Siete voces, JaGáT NeHIM dependen de la palabra de la boca, todo el año. Ahora durante los siete días de Sukkót, todos dependen solamente de la acción. Y necesitamos una acción, no de palabras, pues en el tiempo de los siete días de Sukkót se bendice para todo el año.

Las Mitzvót que dependen de la palabra extienden interioridad, pero no extienden iluminación de Jojmá de la línea izquierda, pues es exterioridad. Y las Mitzvót que dependen de los actos extienden exterioridad, la iluminación de Jojmá de la línea izquierda, Mojín de VáK (Vav Ketzavót/Seis bordes: Jésed-Guevurá-Tiféret  Nétzaj-Hód-Iesód - JaGáT NeHI) y exterioridad. En los siete días de Sukkót, debemos corregir la exterioridad, la extensión de Jojmá de la izquierda y por esta razón, necesitamos las Mitzvót prácticas, que la pueden evocar.

Es debido a esto que fue dicho, “Ahora durante los siete días de Sukkót, dependen solamente del acto”. Necesitamos un acto para extender la corrección de la exterioridad, que es la iluminación de Jojmá de la izquierda y no de la palabra, pues la palabra extiende sólo la exterioridad, Jasadím, que atraemos a lo largo del año.

Siete voces, JaGáT NeHIM dependen de la palabra de la boca a lo largo del año, y no necesitan acción. Esto es así porque durante los siete días de Sukkót, bendice para todo el año, pues una vez que extendemos iluminación de Jojmá en la izquierda, durante los siete días de Sukkót a JaGáT NeHIM, es suficiente, para el resto del año, para que las Jasadím que extendemos por las Mitzvót que dependen de la palabra a lo largo del año, sean bendecidas con la iluminación de Jojmá de los siete días de Sukkót. Con esto, se convierten en Jasadím reveladas y no necesitan más las Mitzvót que dependen de un acto, para este asunto, sino para otras cosas.

El séptimo día del festival, Hoshaäná Rabbá (la Gran Súplica), es el fin del Dín del mundo y los juicios que se emiten de la casa del Rey, y las Guevurót despiertan y concluyen en ese día. Los sauces del arroyo (äravót) dependen de esas Guevurót y deben despertar las Guevurót en el agua, rodeando el altar siete veces correspondientes a las JaGáT NeHIM que es opuesto a Maljút, para saciar el altar con las aguas de Itzják/Isaac, con la iluminación de Jojmá de la línea izquierda, Itzják, para que el agua pueda llenar el pozo de Isaac, que es Maljút. Cuando ella recibe de la izquierda es cuando ella es convocada. Y cuando ella está llena, todo el mundo es bendecido con agua.

Tres libros se abren en Rósh HaShaná (1 de Tishré, el Nuevo Año judío): de los justos completos, de los malvados completos y de los intermedios. Los justos completos de inmediato son inscritos para la vida. Los malvados completos son de inmediato inscritos para la muerte. Los intermedios quedan pendientes hasta Ióm Kippúr (10 de Tishré/El Día de la Expiación). No se habla de los justos completos (tzaddikím) o los malvados completos (reshaím), pues su sentencia ha sido dictada en el primer día de Rósh HaShaná. De todo lo que se habla es de los intermedios (benoním), que se quedan pendientes hasta Ióm Kippúr. Si se arrepienten, quedan sellados para la vida; y los malvados que no se arrepienten, quedan sellados para la muerte.

Y la expiación de los pecados en Ióm Kippúr es la extensión de la iluminación de Jojmá por medio del ascenso de Maljút a Biná, pues hay expiación de los pecados sólo por la revelación de la luz de Jojmá, la luz de la vida. Por lo tanto, los intermedios, que se arrepienten, son entonces merecedores de la expiación de los pecados y de quedar inscritos a la vida. Sin embargo, esto no da por terminado el asunto, pues la luz de Jojmá no ilumina sin Jasadím y el tiempo de extensión de Jasadím para vestirse en Jojmá se realiza durante los siete días de Sukkót. Se deduce que en el séptimo día, en Hoshaäná Rabbá, el vestido de Jojmá en Jasadím queda completado y entonces la inscripción a la vida que fue realizado en Ióm Kippúr queda completada.

De igual forma, para aquellos que no se arrepintieron y fueron inscritos para la muerte en Ióm Kippúr, la inscripción aún no ha sido completada, pues tienen tiempo para el arrepentimiento hasta el séptimo día de Sukkót, ya que Jojmá continúa a lo largo de ese tiempo. Y si ellos se arrepienten de sus iniquidades quedarán expiados por ella y ellos serán merecedores de la luz de la vida.

Por esta razón, el día de Hoshaäná Rabbá es considerado un día de entrega de los veredictos a los malajím/ángeles, ya sea para la vida o para la muerte. Esto es así porque después de que se entregan los veredictos a los ejecutores, ya no pueden regresarse, pues después del día de Hoshaäná Rabbá ya no hay extensión de Jojmá. Y puesto que después ya no hay más extensión de Jojmá, los veredictos se emiten desde la casa del Rey, es decir que se ejecutan y no regresan. Asimismo, Guevurá despierta y concluye en ese día, pues Guevurá, que es extensión de Jojmá, finaliza en ese día y no extiende Jojmá para más adelante.

En el día de Hoshaäná Rabbá, las Guevurót son requeridas para extender agua, lo cual es la iluminación de Jojmá, que es extraída únicamente con Guevurót y Diním (juicios). Después, deben concluir pues en ese día, el Dín (juicio) concluye, es decir, que ya no hay necesidad de extender la iluminación de Jojmá que se extrae del Dín. Esta es la razón por la que se necesita golpear a los sauces contra el suelo y concluirlos, es decir su iluminación, para que no sean encontrados. Es porque en este día hay despertar de Jojmá y la conclusión de Jojmá. Por lo tanto, usamos a los äravót (sauces del arroyo), lo cual alude a NH (Nétzaj y Hód), en donde Jojmá aparece a través de los Diním para realizar un despertar y una conclusión.

El suelo es la última Bejiná (discernimiento) en Maljút. Cuando los sauces son golpeados contra el suelo, la iluminación de Jojmá se extiende con los Diním a la última Bejiná de Maljút, en donde está la conclusión de su iluminación. La Razón por la cual Jojmá aparece sólo en los sauces, en NH, es que desde el Jazé (pecho) y arriba, es GáR (Guímel Rishonót/Tres Primeras: Jojmá-Biná y Dáät) de Gúf (cuerpo) y NH desde el Jazé hacia abajo es VaK (JaGáT NeHI) de Gúf. Y puesto que los GáR de Jojmá estaban ocultos y sólo VáK de Jojmá estaban revelados, su lugar está en VáK de Gúf, lo cual es NH (Nétzaj y Hód). A esto se refiere los äravót (sauces del arroyo).

Son denominados, “sauces del arroyo”, porque las Guevurót, la iluminación de Jojmá con los Diním en ellos, surgen de la corriente de agua que es Biná, y en ese día despiertan y concluyen. En ese día está escrito, “Entonces Itzják/Isaac regresó cavó los pozos de agua”. Escribe, “pozos”, sin una letra Vav (en hebreo), pues alude a Maljút que es llamada “un pozo”.

¿A qué se refiere con “regresó”? En el primer día del mes, en Rósh HaShaná, estaba el comienzo del Dín a través del mundo e Itzják/Isaac, la línea izquierda, ascendió al trono de la justicia para juzgar al mundo. En Hoshaäná Rabbá, Isaac regresó a atraer a los Diním y a concluir los Diním y a cavar los pozos de agua, es decir, para derramar Guevurót para la congregación de Israel, Maljút, el pozo para atraer el agua, la iluminación de Jojmá, es extendida hacia el mundo solamente con Jojmá.

En Rósh HaShaná, los Diním de la línea izquierda comienzan a aparecer. En ese tiempo, Maljút estaba cerca de dos grandes luces, vistiendo la línea izquierda de Biná. Por medio de soplar el cuerno (shofár), la línea izquierda fue disminuida por la línea media a través de dos acciones: primero en Manülá (cerradura), lo cual la disminuye completamente y luego por medio de la Miftajá (llave), que la habilita para recibir VáK de Jojmá. En Ióm Kippúr, a través del ascenso de Maljút a Biná, los VáK de Jojmá aparecieron en ella con cinco tormentos que ella recibió de la línea izquierda de Biná.

Luego de Ióm Kippúr, los Jasadím para vestir Jojmá comienzan a aparecer, sin los cuales Jojmá no ilumina y la corrección de Jojmá se extiende en Jasadím a través de rodear el altar hasta el día de Hoshaäná Rabbá, lo cual es Maljút de los siete días de Sukkót, JaGáT NeHÍM. Por lo tanto, se debe volver a despertar a Jojmá con la corrección de Jasadím en la circunvalación del altar, para corregir el séptimo día con ella, y para concluir la extensión de Jojmá completamente. Esto es así porque desde que ella llegó a Maljút, ya no hay necesidad de extenderla.

Y debido a que estas Guevurót descienden solamente a través de las nubes, los Diním, y solo en un día nublado, el viento (Rúaj) de los pilares del mundo se asienta sobre ellos, así debe ser porque el mundo los necesita, pues el mundo fue creado con Dín en Rósh HaShaná. Por esta razón, los Diním siempre deben aparecer con el agua, lo cual es la iluminación de Jojmá, para impedir que los malvados se aferren a la línea izquierda y traer de regreso los Diním de Rósh HaShaná.

Todo debe ser así porque todo depende del acto. Por lo tanto, el kohén (sacerdote), mediante el acto y la corrección que realiza abajo, durante el acto de la ofrenda, los superiores y los inferiores despiertan para corregirlos, y son corregidos por él. De igual forma, a través del acto de las cuatro especies y los sauces en Hoshaäná Rabbá, Jojmá es corregida por medio de los Diním que aparecen junto con ella para que no exista un aferramiento de los malvados a ella.

El sauce se parece a unos labios en ese día, pues en ese día el asunto depende de los labios. Esto es así porque en ese día, el Rey ordena al encargado que se entreguen los veredictos, los Diním (juicios) concluyen y la acusación se oculta del mundo. El primer día del mes es el inicio del Dín (juicio) y la conclusión es en ese día.

El primer día del mes, Maljút aferra a la línea izquierda de Biná, Itzják/Isaac. Y a través de hacer resonar el shofár, la línea media despierta para acoplarse con el Masáj de Jirík, para disminuir la línea izquierda, primero con Manülá (cerradura) y luego con Miftajá (llave), Significa que Maljút ha ascendido a Biná y Biná ha retornado a ser VáK sin un Rósh.

Por otra parte, una corrección se hace con esto para someter a los Diním de la línea izquierda y a prepararla para unirse con la derecha. Por otra parte, los Diním de Katnút (pequeñez) de Biná se aferraron debido al ascenso de Maljút dentro de ella, por lo cual los exteriores salieron con acusaciones en contra de Biná, diciendo que existe una deficiencia en ella, por lo que ellos se aferrarían a ella en el lugar de la deficiencia, como es su costumbre. Por esta razón, hubo necesidad de tapar la boca de los externos para que no acusaran a Biná. Esto se hizo en Ióm Kippúr y durante los siete días de Sukkót cuando Maljút descendió desde Biná, una vez más y Biná recibió de vuelta sus GáR de ser Vák de Jojmá.

Es debido a esto que se dijo que la acusación estaba oculta del mundo, que en ese día en que Hoshaäná Rabbá concluía, VáK de Jojmá regresaba a Biná como antes y las bocas de los externos son cerradas para que no acusen a Biná. Y una vez que terminan las acusaciones, ya no hay necesidad de extender Jojmá, que trae a los Diním con ella, pues ya que han terminado las acusaciones, ya no hay necesidad de la develación de Jojmá. A través de las Mitzvót que dependen de la acción, que son sostener el luláv y el äravá (sauce), se atrae a Jojmá y a través de las Mitzvót que dependen de la palabra, los labios, se atrae a Jasadím.

Se dijo que en ese día, el sauce se parece a unos labios. Esto es así porque con el sauce, despierta Jojmá y concluye con los Guevurót, para que a partir de ese momento, sólo podamos extender Jasadím de las Mitzvót que dependen de los labios. Por lo tanto hay un indicio de ello ya que las hojas del sauce parecen labios.

En ese día, las naciones idólatras completan y concluyen sus bendiciones y se encuentran en Dín. Y en ese día, Israel concluye sus Diním y se encuentran con bendiciones. Esto es así porque en Sheminí Ätzéret (el octavo día de la asamblea), se van a alegrar con el Rey, tomando de Él bendiciones para todos los días del año. En esta alegría sólo Israel participa con el Rey, y aquel que se sienta con el Rey y comparte con Él solo, pide lo que quiera y el Rey se lo da. Por lo tanto, Israel comienza a recibir las bendiciones y las naciones idólatras concluyen sus bendiciones. Es debido a esto que está escrito, “‘Yo te he amado’ dice el Señor”. (Malají/Malaquías 1:2)

Esto es así porque las naciones del mundo se aferran a la línea izquierda, de donde se desprende iluminación de Jojmá. No pueden recibir de la línea derecha, Jasadím, pues su raíz está sólo en la izquierda. Por consiguiente, las naciones del mundo reciben sus bendiciones durante los siete días de Sukkót, cuando Jojmá extiende en ellas desde la línea izquierda, a través del acto de las Mitzvót.

Esto es los setenta toros que ofrecemos en los siete días de la festividad, frente a las setenta naciones, de los que se alimentan. Resulta que en el séptimo día, luego de que se ha golpeado el sauce, cuando la extensión de Jojmá se ha interrumpido, las bendiciones cesan para las naciones porque ellas no tienen nada más de donde nutrirse. Es debido a esto que se dijo que en ese día, las naciones idólatras completan y concluyen sus bendiciones, pues en ese día, la extensión de Jojma, que son todas sus bendiciones, ya ha concluido y ellas se encuentran en Dín pues no pueden nutrirse de Jasadím de la derecha y se encuentran vacías.

Sin embargo, Israel se aferra a la línea media, de donde provienen las Jasadím, y toda su raíz se encuentra allí. Por lo tanto, ya que Jojmá que extiende de la línea izquierda en los siete días de la festividad es atraída sólo con Diním, una vez que la iluminación de Jojmá ha concluido, los Diním que se encuentran con ella finalizan también. En ese día Israel finaliza sus Diním porque ya no extienden iluminación de Jojmá y ellos se encuentran en las bendiciones, en Jasadím, que extienden de la línea media, la cual es la raíz de ellos. Esto es así porque el Zivúg (acoplamiento) de ZA y Maljút en Sheminí Ätzéret (el día octavo de la Asamblea), las bendiciones, es decir Jasadím, son atraídas para Israel para todo el resto del año.

Debido a que la alegría es por el otorgamiento de Jasadím, que ninguna otra nación puede recibir sino Israel, se deduce que en ese tiempo, sólo Israel está con el Rey. Es así porque la iluminación de la izquierda que es desde la raíz de las naciones, ha finalizado y ellos no tienen más de donde nutrirse y la iluminación de la línea media, la iluminación de Jasadím, que es de la raíz de Israel comienza en el octavo de la Asamblea y continúa a lo largo del año.

Por lo tanto vemos que Ësáv/Esaú se encuentra en paz, en Maljút, en las grandes y supremas ciudades dominando sobre el mundo. ¿Y por qué está escrito “Entregué sus montes a la desolación”? Es de esta manera en cada lugar. Porque el santo Rey emite un veredicto y coloca el veredicto en esta sentencia, el texto lo atestigua como si estuviera hecho, aunque no se haya llevado a cabo el veredicto. Es debido a esto que está escrito, “Entregué sus montes a la desolación”, pues ya lo he previsto en Mi veredicto y esto se convertirá en realidad a su debido tiempo, Asimismo, todo el bien que Él había sentenciado para Israel se convertirá en realidad a su debido tiempo, tal como está escrito, “Yo, el Señor, he hablado y lo haré”. (Iejezkél/Ezequiel 17:24)

(Séfer HaZóhar - Parashát Tzáv)