67. GRANDES EXPECTATIVAS - איע
Cuando esperas el mundo de tus amigos, tu familia o la vida
y no recibes nada, puedes invocar este Nombre para recibir respuestas. Nuestras
acciones más positivas con frecuencia no son premiadas en largos períodos de tiempo.
Esto es para dejar un espacio para que brille nuestro libre albedrío. Dentro de
ese espacio "grandes expectativas" nos retan, "pruebas de
fe" nos confrontan. Esperamos un retorno rápido de nuestras inversiones
espirituales, pero cuando el tiempo las demora, nos volvemos dudosos,
profundamente decepcionados, desesperanzados y desvalidos.
Tenemos libre albedrío para elevarnos sobre esas nubes de
melancolía y condena. Ejercitando este libre albedrío podemos verdaderamente
ganar nuestra buena fortuna. A veces esto puede ser una tarea extremadamente
difícil. Una gran expectativa es un adversario formidable.
La clave para la satisfacción es simplemente alejar nuestra
concentración de los resultados y expectativas. En cambio nos enfocamos en
resistir nuestros impulsos reactivos, que no son más que respuestas robotizadas
ante una situación dada. En el momento que resistimos la expectativas, hemos
ejercitado el rasgo sagrado del libre albedrío.
El ego ya no tiene control, nosotros lo tenemos. Esto abre
una amplia puerta a todas las posibilidades.
Meditación
Meditando sobre este Nombre ganamos control sobre el poder
del tiempo en nuestra vida. En lugar de estar constantemente pidiendo más al
mañana, apreciamos lo que tenemos y lo que somos ahora mismo. Las expectativas
falsas y egoístas son eliminadas.
“Viva HaShem, y bendita sea mi roca, y enaltecido sea el Di-s
de mi salvación”.
(Tehilim/Salmos 18:47)
No hay comentarios:
Publicar un comentario