SOLTAR / DEJAR IR - EXTRACTO DE LA
CLASE GRUPAL DEL DOMINGO 29 de Noviembre de 2020
Cortesía de morá Batia bat Dora para
Kabbalah y Torah en Expansión
Partiendo de la base de que cada
persona tiene que seguir su propio camino, la sabiduría kabalista nos indica
una serie de herramientas y guía de transformación personal que conducen a la
persona hacia su versión más completa.
Muchas veces sucede en la vida que
lo que creemos mejor para nosotros no es lo mejor para el completo del Ser, es
tan solo algo agradable momentáneo para el cuerpo.
Cuando tratamos sobre la
transformación interna, no se trata de lo que uno quiere sino de lo que se
tiene que hacer. Cuando nos dirigimos hacia este trabajo proactivo con la Luz,
toda nuestra vida se reorganiza, incluso aun cuando puede parecer haber mayor
caos, esto es algo temporal en el reajuste.
Tenemos que trabajarnos internamente
para dejar ir situaciones, experiencias, apegos, relaciones personales,
reconocimientos, amores, posesión, aprobación... todo lo que nos convierte en
esclavos de las emociones y los egos.
En Kabbalá tratándose de recibir,
para conseguir recibirlo todo, tenemos que estar dispuestos a dejar ir todo. En
Kabbalá el concepto de dar es para recibir más, soltar para recibir. Muchas
personas tienen unos conceptos arraigados erróneos sobre recibir y también
consecuentemente para soltar y para dar. La conciencia correcta para esta
enseñanza, es recibir para seguir dando, recibir para compartir. Esto es el
propósito de la Creación.
Cuanto más se exige algo más se
aleja. Cuantas más expectativas se tiene de algo mayor desilusión produce, como
exigir a otras personas, parejas, negocios, situaciones... Cierto es que es muy difícil soltar algo que
amas, que deseas, esto es un indicio de que el deseo es real, que es realmente
difícil. Cuanto mayor es el esfuerzo mayor es la recompensa.
El beneficio de dejar ir, es
recibirlo todo. Todo lo que la persona puede recibir haciéndola sentir plena en
todos los ámbitos de la vida. Cada persona, cada vasija. Esto es, no se trata
de que uno solo obtenga esta completitud, sino toda la humanidad.
Para recibir igualmente, se tiene
que tener un gran deseo.
Así que, el rol de la vasija es
desear, desear de manera infinita para obtener lo máximo, la Luz infinita. A
esto se le denomina en Kabbalá: Kelí Gadol (vasija grande). Estado de Gadlut.
Para que todo fluya en la Creación,
la herramienta para que aquello que deseo pueda quedarse conmigo para siempre,
con cada ser humano, es compartir. Recibir infinitamente para compartir
infinitamente.
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