KETORET: La ofrenda más querida por el Creador

KETÓRET: La ofrenda más querida por el Creador

 

Por Mekubal  para Kabbalah y Torah en Expansión

Así como los ‘Kohanim’ (sacerdotes) estaban separados en santidad, su ropa estaba separada y su comida y bebida estaban separadas. Para que pudieran comer y beber algunas de las cosas que habían sido santificadas y ofrecidas en el altar, el lugar donde se realizaba dicho servicio también tenía que estar separado y santificado para otorgar un nivel adicional de ‘Kedushá’ (santidad) al servicio que ellos realizaban.

 

Este elemento de santidad del sitio se aplicó tanto al área general del ‘Mishkán’ (Tabernáculo), es decir, el patio que lo rodea, el Santuario, el ‘Kódesh HaKodashim’ (Lugar Santísimo), así como a los distintos grados de santidad de los distintos tipos de sacrificios.

 

Los ‘Korbanot’ (“sacrificios”) ofrecidos en el altar de bronce “exterior” poseían un grado de santidad diferente al del ‘Ketóret’ (incienso) que se ofrecía en el altar de oro dentro del Santuario.

 

El ‘Ketóret’ fue la ofrenda más querida por Di-s y atrajo la buena voluntad de Di-s hacia Sus criaturas en la tierra.

 

El humo que proviene del incienso se llama קטרת ‘Ketóret’ y el significado de la palabra es קשר ‘Késher’ (“anudar”). El propósito del Ketóret es eliminar la negatividad y unir la Columna Derecha con su energía de Jasadim para equilibrar la Luz. El humo crea la conexión.

 

Dado que la esencia de la ofrenda de incienso consistía en la fragancia que exudaba, algo que está más cerca del רוח ‘Rúaj’ (espíritu), es decir, un concepto espiritual, algo que está especialmente más cerca de Di-s que es espíritu puro. Sólo puede ser apreciado por el alma, no por el ‘Guf’ (cuerpo). Por lo tanto, fue diseñado de manera única para establecer una comunión cercana con la שכינה ‘Shejiná’ (Presencia Divina). Por eso se ofrecía dentro del ‘Mikdash’ (Santuario).

 

FOTO: Pergamino con la oración Ketóret disponible en Mekubal