ENCENDER LAS VELAS DE SHABBAT
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ENCENDER LAS VELAS DE SHABBAT
Por Kabbalah y Torah
Tradicionalmente, las dos velas de Shabbat simbolizan los dos aspectos del Shabbat: ‘ZAJOR’ (para recordar) y ‘SHAMOR’ (para observar). Los Diez Mandamientos aparecen dos veces en la Torá. La primera vez, se nos dice que “recordemos (zajor) el Shabbat” (Shemot/Éxodo 20:8); la segunda vez, se nos dice que “observemos (shamor) el Shabbat” (Devarim/Deuteronomio 5:12).
‘Zajor’ hace alusión a los mandamientos positivos y ‘Shamor’ a los mandamientos negativos. Obviamente, ‘Zajor’ pertenece al pilar derecho de la misericordia en el Árbol de la Vida y ‘Shamor’ al pilar izquierdo de la justicia.
“VESHAMERÚ VENÉ-ISRAEL ET-HASHSHABBAT - Y los hijos de Israel guardarán el Shabbát” (Shemot/Éxodo 31:16) se refiere a la noche, el secreto de la mujer. “ZAJOR ET-IOM HASHSHABBAT LEKADDESHÓ - Acuérdate del día del sábado para santificarlo” (Shemot/Éxodo 20:8) se refiere al día, el secreto del hombre. (Zóhar II: 138a)
Por lo tanto, los dos principios se relacionan en última instancia con el lado femenino y masculino de Di-s. Las dos velas juntas representan la unión del principio femenino y masculino, y este es el secreto esotérico revelado por el Zóhar. Pero aún más, las luces representan la chispa divina femenina (252) y masculina (248) escondida dentro del alma humana. Como está escrito: “NER ADO-NAI’ (Vela del Señor) ‘NISHMAT ADAM’ (es el alma del hombre)” (Mishlé/Proverbios 20:27).
Encender las velas de Shabbat es tarea de la mujer, ya que es por sus méritos que la Shejiná es llamada a la casa: “Cuando un hombre está en casa, la raíz de su casa es la señora de la casa, porque por ella la Shejiná no sale de la casa. Como hemos aprendido: “Itzjak/Isaac la trajo [Rebeca, su esposa] a la tienda de su madre Sará. La luz (vela) se encendió, porque la Shejiná llegó a la casa” (Zóhar 50a).
La señora de la casa debe encender
las dos velas de Shabbat a más tardar dieciocho minutos antes de la puesta del
sol. Después de encender la vela o las velas, acerca las llamas y se dirige
hacia ella, tres veces, mientras imagina atraer el espíritu de Shabbat a sí
misma, y atraer la paz y la santidad de la Reina Shabbat a la casa.
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