LA KAVVANÁ (“Intención”) - (Guímel)
Por Kabbalah y Torah
Si tu voluntad se une con la
Voluntad del Creador y se dirige a un asunto adecuado para estar sujeto a la
‘Shéfa’ (“Abundancia Divina”), entonces el Poder Divino causará un cambio de
acuerdo con tu voluntad. Esto sucederá porque el Poder Divino se agregará a tu
poder y la ‘Kavvaná’ hará descender la “Abundancia Divina”. La ‘Shéfa’ viene de
Kéter y desciende a través de Jojmá, Biná y Dáät.
Para atraer el ‘Poder Divino’ a la
manifestación, debes seguir estos pasos:
A)Debes enfocar tu ‘Kavvaná’
(“intención”) en el nivel del espíritu. La ‘Shéfa’ viene a nosotros desde el
nivel de Atzilút (Mundo de la Emanación). El acto de enfocar la intención la
lleva al nivel de Beriá (Mundo de la Creación). Beriá es el nivel del Plan
Divino, y aquí es donde tu ‘Kavvaná’ (“intención”) debe convertirse en un
recipiente para la Shéfa.
B) Tu ‘Kavvaná’ debe expresarse en
una forma adecuada, que se realiza mediante el uso de una ‘Palabra de Poder’ o
‘Nombre Santo’ apropiado para proporcionar una forma a través de la cual se
pueda dirigir el poder. Esto trae el poder a Ietzirá (Mundo de la Formación).
C) Finalmente, debes realizar un
acto simbólico, como realizar o adquirir una Kaméä Kabalista para manifestar el
poder en Äsiá (Mundo de la Acción).
Y de esta manera, los antiguos
‘Mekubalím’ (cabalistas) solían pasar un tiempo antes de la ‘Tefil´lá’
(“oración”, “rezo”) para eliminar los pensamientos restantes y enfocarse en el
camino de la ‘Kavvaná’ y el poder de su dirección.
Y [pasaban] un tiempo en oración
para expresar la ‘Kavvaná’ en un discurso verbal. Y [pasaban] un tiempo después
de la oración contemplando cómo dirigir el poder de la ‘Kavvaná’, que se
completa en el discurso, en el camino del trabajo visible. Y debido a que eran
‘Jasidím’ (“piadosos”), su Torá (es decir, la recitación de los pasajes
bíblicos) se convertía en acción y su trabajo era bendecido.
Este principio fue aplicado por los
antiguos sabios a cada acto religioso. Primero, aclaraban su mente y se
enfocaban en la intención de la ‘Tefil´lá’. Luego, dirigían toda su intención,
devoción y poder emocional hacia la oración. Y finalmente, encontraban una
manera de manifestar la intención de su oración. Por lo tanto, su recitación de
versículos bíblicos traía cambios poderosos y considerables.
Este es el camino de los caminos de
la profecía: el que se familiarice con él se elevará al nivel de la ‘Nevuá
(profecía).
En otras palabras, si sigues este
camino, tendrás el poder de los ‘Neviím (profetas).
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