LA LETRA י IUD

Imagen
LA LETRA י IUD   Por Kabbalah y Torah en Expansión   La letra י ‘Iud’, un pequeño punto suspendido, revela la chispa de bondad esencial escondida en la letra ט ‘Tet’. A continuación del ‘Tzimtzum’ inicial (la contracción de la ‘Or En Sof’ (Luz Infinita) de HaShem para hacer “lugar” a la Creación), quedó dentro del ‘Jalal’ (“espacio vacío”) un punto potencial e individual o ‘Reshimú’ (“impresión”). El secreto de este punto es el poder del Infinito de contener el fenómeno finito dentro de Sí Mismo, y expresarlo en la realidad externa aparente. Una manifestación finita comienza de un punto de dimensión cero, luego se desarrolla en una línea unidimensional y una superficie bidimensional. Esto está insinuado en la escritura completa de la letra י ‘Iud’ יוד (iud-vav-dálet): “punto” (iud), “línea” (vav), “superficie” (dálet).   Estas 3 etapas corresponden en Kabbalá a: “punto” (Nekuddá), “espectro” (Sefirá) y “rostro” (Partzuf). El punto inicial, el poder esencial de la letra

PARASHA BALAK: CON RESPECTO AL MAL DE OJO


PARASHÁT BALÁK: CON RESPECTO AL MAL DE OJO

Por Kabbalah y Torah  

Biläm tenía el poder de darles Mal de Ojo a los israelitas. El Zóhar dice:

Sin embargo, el ojo del perverso Biläm era maligno en toda forma. Lo que él miraba era destruido como con una llama, ya que no existe tal ojo maligno en el mundo como el ojo de ese perverso...

(Zóhar, Balák 39:390)

Hablamos bastante acerca del Äin Hará (ojo maligno), pero la mayoría de la gente no conoce en realidad cómo funciona. ¿Cómo puede ser que una persona pueda causar sufrimiento a otra con tan sólo verla?

El ojo maligno despierta fuerzas sutiles. Por ejemplo, lo que ocurre cuando alguien ve envidiosamente el automóvil de alguien más y dice “¡Vaya! ¡Qué automóvil!”, en su corazón se está preguntando: “¿Por qué él tiene ese auto?”. De este modo, la atención del Lado Negativo es atraída y, si el propietario no merece ese automóvil, le es arrebatado.

La verdad es que no merecemos la mayoría de las cosas que tenemos, pero el Creador nos las da como resultado de acciones que, en el mejor de los casos, realizaremos en el futuro. Sin embargo, cuando otras personas nos juzgan, se despierta un juicio celestial sobre nosotros, ocasionando que perdamos lo que tenemos. Nunca debemos asumir que nada malo les ocurrirá a las personas sólo porque son justas o dadoras. Ellas también son juzgadas, y cualquier cosa que no merezcan se les puede quitar. Al participar y conectar con esta lectura, tenemos protección para que aun cuando alguien nos dé mal de ojo, seamos tratados con misericordia y el juicio no pueda prevalecer sobre nosotros.

Hay acciones que podemos realizar para prevenir el mal de ojo. Una de las más importantes de ellas es usar el Hilo Rojo que es enrollado alrededor de la tumba de Rajél en Israel e imbuido de la protección del Creador. Esto se debe a que Rajél la Matriarca, quien lloró por sus hijos, es la fuente de misericordia para todos nosotros: ella es la madre de todos.

Cuando la Shejiná se apareció por vez primera a Moshé, Ella es llamada 'un ángel', como dice: “VAIERÁ  MALÁJ  ADO-NÁI  ELÁV  BELABBAT-ÉSH - y se le apareció el ángel del Señor en una llama de fuego...” (Shemót/Éxodo 3:2). A Iaäkóv, Ella no se le apareció como eso, excepto en una semejanza, significando: en Rajél abajo, quien es la semejanza de Rajél arriba, la cual es Maljút. Está escrito: “...VERAJÉL BÁA - Y Raquel llegó...” (Bereshít/Génesis 29:9), la cual es la forma de otra Rajél Arriba, que es Maljút, como está escrito: “Así dice Di-s: 'Una voz se oye en Ramá... Raquél que llora por sus hijos...” (Irmiáhu/Jeremías 31:14). Esta Rajél es el secreto de Maljút. Aquí también, “Rajél llegó” sin especificar indica a Maljút. “... con las ovejas...” (Bereshít/Génesis 29:9). Estos son los niveles de Maljút. “...de su padre...” (ibíd.), ciertamente, ya que Abbá, que es Jojmá, estableció a la hija, que es Maljút. Y todos, esto es: todos los mundos, fueron designados y asignados a las manos de ella, “...KÍ  ROÄ  HÍ - porque era pastora” (ibíd.). Ella también las guiaba y había sido asignada sobre ellas.

(Zóhar, Balák 6:50)

Cuando usamos el Hilo Rojo en nuestra muñeca izquierda (la muñeca izquierda representa el juicio), tenemos control sobre cualquier juicio que pueda caer sobre nosotros. Más importante aún, si nos abstenemos de juzgar a los demás, entonces el juicio no es traído a este mundo para ellos ni para nosotros tampoco. Si nos restringimos de juzgar a los demás, el mal de ojo no tiene control sobre nosotros. En el Zóhar leemos:

“No comas el pan de aquél que causa mal de ojo”, porque el pan o beneficio de esa persona que causa mal de ojo no merece ser comido o beneficiarse de ello. Cuando Israel descendió a Egipto, si no hubieran probado el pan de Egipto, no habrían sido abandonados al exilio en Egipto, y los egipcios no habrían sido capaces de dañarlos.

(Zóhar, Shemót 4:21)

Aquí recibimos protección de las fuerzas negativas ya sea de miradas maliciosas de otras personas o maldiciones, que intentan penetrar nuestras defensas. Cada día realizamos tanto acciones positivas como negativas, pero vivimos bajo un escudo de protección sin el cual nunca podríamos sobrevivir a las repercusiones de incluso una sola de nuestras acciones negativas. La parashá Balák nos ayuda a conectarnos con esa clase de protección y a fortalecerla.


Comentarios

Entradas populares de este blog

TEHILIM/SALMOS 145 - HEBREO-FONÉTICA Y ESPAÑOL

PITUM KETORET - HEBREO-FONÉTICA-ESPAÑOL

TEHILIM - SALMOS 91 YOSHEV - El que habita - SEGULÁ CONTRA MAZIKIM (ESPÍRITUS DAÑINOS) - MEKATREGUIM Y LILIN