LA LETRA י IUD

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LA LETRA י IUD   Por Kabbalah y Torah en Expansión   La letra י ‘Iud’, un pequeño punto suspendido, revela la chispa de bondad esencial escondida en la letra ט ‘Tet’. A continuación del ‘Tzimtzum’ inicial (la contracción de la ‘Or En Sof’ (Luz Infinita) de HaShem para hacer “lugar” a la Creación), quedó dentro del ‘Jalal’ (“espacio vacío”) un punto potencial e individual o ‘Reshimú’ (“impresión”). El secreto de este punto es el poder del Infinito de contener el fenómeno finito dentro de Sí Mismo, y expresarlo en la realidad externa aparente. Una manifestación finita comienza de un punto de dimensión cero, luego se desarrolla en una línea unidimensional y una superficie bidimensional. Esto está insinuado en la escritura completa de la letra י ‘Iud’ יוד (iud-vav-dálet): “punto” (iud), “línea” (vav), “superficie” (dálet).   Estas 3 etapas corresponden en Kabbalá a: “punto” (Nekuddá), “espectro” (Sefirá) y “rostro” (Partzuf). El punto inicial, el poder esencial de la letra

LA PRIMERA TORÁ: EL ÁRBOL DE LA VIDA PURO


LA PRIMERA TORÁ: EL ÁRBOL DE LA VIDA PURO

Por Kabbalah y Torah 

Tehil´lím/Salmos 19:9: “MITZVÁT  ADO-NÁI  BARÁ  MEIRÁT  ËNÁIM - El precepto del Señor es puro, que alumbra los ojos”.

Mitzvá se traduce generalmente como un mandamiento, pero no lo es. Es una oportunidad para conectarnos con la Luz y manifestarla en nuestra vida.

De este versículo aprendemos que la Mitzvá trae la Luz de Jojmá y los ojos son la conexión importante.

La primera vez que Di-s se refiere a la Torá es cuando él inició a Josué en el liderazgo de la nación. En Iehoshúä/Josué 1:7 Di-s le dice: “RÁK  JAZÁK  VE´EMÁTZ  MEÓD  LISHMÓR  LAÄSÓT  KEJOL-HATTORÁ  ASHÉR  TZIVVEJÁ  MOSHÉ  ÄVDÍ - Solamente te esfuerces, y seas muy valiente, para que guardes y hagas conforme a toda mi ley, que Moisés, mi siervo, te mandó”.

Di-s no está diciendo “La Torá que le di a Moisés”, sino “La Torá que Moisés reveló”.

La Torá de Di-s no tiene límites. El secreto es que la Torá de Di-s fue la que se rompió en el Monte Sinaí debido al pecado del becerro de oro.

La idea aquí es que la revelación de la Luz sigue el canal para ello. En este caso, la Torá es la Luz que revela Moisés.

En el siguiente versículo de Iehoshúä/Josué 1:8 Di-s dice: “LO-IAMÚSH  SEFÉR  HATTORÁ  HAZZÉ  MIPPÍJA  VEHAGUÍTA   IOMÁM  VALÁILA  LEMÁÄN  TISHMÓR  LAÄSÓT  KEJÓL-HAKKATÚV   KI-ÁZ  TATZLÍAJ  ET-DERAJÉJA  VEÁZ  TASKÍL - El libro de esta ley nunca se apartará de tu boca; antes de día y de noche meditarás en él, para que guardes y hagas conforme a todo lo que en él está escrito; porque entonces harás prosperar tu camino, y entonces todo lo entenderás”.

El Zóhar nos da la oportunidad de conectarnos con la meditación y las discusiones de Rabbí Shimön, su hijo, Moisés, Elías y los amigos. El estudio del Zóhar puede atraer la Luz de la primera Torá para nosotros, que era el Árbol de la Vida puro.

(Tikkuné HazZóhar) 


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