LA CAPACIDAD DE CONTROLAR LA MATERIA
Por Kabbalah y Torah
פִּינְחָס בֶּן־אֶלְעָזָר בֶּן־אַהֲרֹן הַכֹּהֵן
הֵשִׁיב אֶת־חֲמָתִי מֵעַל בְּנֵי־יִשְׂרָאֵל בְּקַנְאוֹ אֶת־קִנְאָתִי בְּתוֹכָם וְלֹא־כִלִּיתִי
אֶת־בְּנֵי־יִשְׂרָאֵל בְּקִנְאָתִי
PINEJÁS BEN-ELÄZÁR BEN-AHARÓN HAKKOHÉN HESHÍV ET-JAMATÍ
MEÄL
BENE-ISRAÉL BEKANÓ ET-KINATÍ BETOJÁM VELO-JIL´LÍTI ET-BENÉ-ISRAÉL BEKINATÍ
“Finees, hijo de Eleazar, hijo de
Aarón el sacerdote, ha hecho apartar mi furor de los hijos de Israel, llevado
de celo entre ellos; por lo cual yo no he consumido en mi celo a los hijos de
Israel”. (Devarím/Números 25:11)
Hay una Iúd pequeña en el nombre Pinejás.
La Kabbaláh nos enseña que cada letra hebrea contiene a la Iúd, que es la
fuente de toda materia, aunque su forma siempre sea modificada para ser el
componente de una letra en específico. Aquí, donde es más pequeña de lo normal,
nos da la capacidad de reducir la influencia de la realidad física así como nos
ayuda a disminuir nuestro ego para que la Luz del Creador pueda llenarnos de
vida. La Iúd está presente en el nombre de Pinejás porque él tenía la capacidad
de controlar la materia.
... VeRúaj HakKódesh [Y el Espíritu
Santo], esto es: Maljút, le gritó: “Para guardarte de la mujer extraña, la
mujer extranjera que suaviza sus palabras...” (Mishlé/Proverbios 7:5). Pregunta:
¿Qué está esto tratando de enseñarnos aquí? Y responde esto nos está enseñando
que todo aquel que se guarda de tal cosa como lo hizo Ioséf está atado a la
Shejiná y se aferra a este testimonio que es Maljút.
¿Y cuál es éste? Éste es la Hé que
le fue añadida, como está escrito: “ËDUT
BIHOSÉF SAMÓ - Por testimonio en
José lo ha constituido” (Tehil´lím/Salmos 81:6a). También en nuestra sección,
una Iúd fue añadida al nombre de Pinejás porque él era celoso sobre el mismo
asunto, el caso de Zimrí, porque la Iúd insinúa a Maljút.
(Zóhar, Pinejás 5:16)
Y él responde: Porque hay dos juegos
de alefatos registrados: un alefato de letras grandes y uno de letras pequeñas.
Y explica: Las letras grandes pertenecen al mundo por Venir y están en el
aspecto de Biná, que es llamada ‘Ölám Habbá/el mundo por venir’, en tanto que
las letras pequeñas pertenecen a este mundo y son del aspecto de Maljút, que es
llamada ‘Ölám Hazzé/este mundo’. Aquí se encuentra la razón para la letra
pequeña Iúd, que es una señal del Pacto Sagrado, a saber: Maljút. Dado que Pinejás
era celoso de este Pacto, una Iúd pequeña le fue añadida, la cual es el secreto
de este Pacto, a saber: Maljút.
(Zóhar, Pinejás 20:129)
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