ANOJÍ: EL MISTERIO DEL NOMBRE
SAGRADO
Elo-hím dijo todas estas palabras/cosas:
ANOJÍ (Yo) soy Ado-nái Elo-héja (el Señor, tu Di-s) (Shemót/Éxodo 20:1-2). Con
la palabra Kol (todo) las Sagradas Escrituras nos indican que el Nombre ANOJÍ (Yo)
abarca todos los Nombres Sagrados, así: como todos los Mandamientos de la Ley. Esta
palabra introduce también el Nombre Sagrado IHV´H que designa el Trono Supremo,
cuyo plenilunio se confunde con la luz Propagada por el mismo Trono…
ANOJÍ es el Misterio de todo, la síntesis
de todas las letras y de todos los misterios de Arriba y de Abajo. Es ANOJÍ quien
contiene el misterio de la recompensa de los justos que observan los mitzvót (preceptos).
El primer y el último Mandamiento corresponde a las dos expresiones del
Decálogo: Recuerda y Observa.
ANOJÍ encierra el más oculto de los
misterios, contiene el Misterio de los dos Tronos: es él quien purifica el
Templo y quien impide que los extranjeros se acerquen. Hace brillar el Templo y
extermina a los malos espíritus del mundo. Y el Santo, Bendito Sea, se
manifestará, solo, en Su Gloria. Así pues, ANOJÍ encierra el misterio del
Nombre Sagrado.
(Séfer HaZóhar)
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