LA LETRA ז ZÁIN

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LA LETRA ז ZÁIN   Por Kabbalah y Torah en Expansión   El Maguid de Mezeritch, el sucesor del Báäl Shem Tov, enseña que el ‘Pasuk’ (“versículo”) de Mishlé/Proverbios 12:4: “ÉSHET-JÁIL   ÄTÉRET   BAÄLÁH - La mujer virtuosa es corona de su marido” alude a la forma de la letra ז ‘Záin’. La letra previa, la ו ‘Vav’, representa la ‘Or Iashar’ (“luz directa”) de HaShem que desciende al mundo. La ז ‘Záin’, cuya forma es similar a la ו ‘Vav’, pero con una corona en la parte Superior, refleja la ‘Or Iashar’ de la ‘Vav’ como ‘Or Jozer’ (“luz retornante”). La ‘Or Jozer’ asciende con tan tremenda fuerza, que llega a un estado de conciencia más elevado que el del punto original revelado de la ‘Or Iashar’. Al llegar al reino supraconciente preliminar de Kéter (“la corona”), se amplía la percepción tanto a izquierda como a derecha. En verdad, “No hay izquierda en ‘Ättik’ (“El Anciano”, el nivel de Kéter), todo es derecha”. Esto significa que el temor a HaShem (izquierda) es indistinguible

EL TELI



SOBRE EL TELI

Muchos cabalistas identifican al Teli con la constelación de Draco como el guardián del polo sobre el cual el Universo se refleja en forma material, otros lo identifican como la Vía Láctea; en todas las interpretaciones, parece denotar una serpiente celestial o un dragón que está estrechamente relacionado al galgal ("ciclo" o "esfera") como en el verso "Él los estableció en el Teli, el Galgal y el Lev ['corazón']" (Séfer Yetzirá 6:1).

Esta división triádica pertenece en realidad al alefato (alfabeto) hebreo y a las 12 letras Elementales, 7 Dobles y 3 Madres. Dentro del alefato, el Teli reina sobre las 12 letras Elementales y, por tanto, sobre las 12 constelaciones zodiacales alineando esta serpiente celestial con el Sendero Solar y el Universo cíclico. Varias fuentes identifican a los Teli con Najash Bariaj ('Serpiente abarcadora '), quizás una referencia a la eclíptica o zodíaco en sí, y como se afirma en el Séfer Yetzirá: "el Teli en el Universo es como un rey en su trono" (6:3).

Curiosamente, la palabra teli nunca aparece en la Biblia, sin embargo ocurre en el Séfer HaBahír, donde se discute como el eje mundial sobre el cual cuelga el globo celestial y el mundo de la manifestación. En hebreo, "teli " significa "colgar" o literalmente "lo que pende de uno", lo que supuso la pregunta de dónde surgió su asociación con una serpiente celestial. Definitivamente en el período medieval, la asociación entre Teli y la Serpiente Polar (Draco) fue concreta. Como Kaplan en su traducción y comentario sobre el Séfer Yetzirá discute, para los cabalistas medievales Teli fue visto como uno de los dos Leviatanes, siendo la versión femenina la serpiente de agua de la tierra, el macho correspondiente a la Serpiente del cielo, Teli. Esto probablemente surgió de la exégesis del Rav Shimón Bar Yojái sobre la creación de los Leviatanes masculinos y femeninos como las "Aguas" superiores e inferiores en el Zóhar. Además, declara que el mundo de la manifestación "cuelga de las aletas del Leviatán", colocando a esta serpiente en el contexto directo del eje polar mundi.

El Rav Ariéh Kaplan y Leonara Le´et en su "Doctrina Secreta de la Kabbaláh" discuten en profundidad las asociaciones entre el Teli y la constelación Draco (la serpiente / dragón que rodea el polo norte celestial).

La noción de la Serpiente de Polo que se cuelga alrededor del eje mundi arroja una luz completamente nueva sobre la narración bíblica de la Serpiente en el Árbol y la caída del Hombre. De todos modos, estos dos Leviatanes ayudan a aclarar Yeshayáhu/Isaías 27:1 donde se dice que estos dos agentes del mundo manifiesto serán destruidos en el día del juicio final:

“Ese día (el día del juicio) con su gran espada afilada, Di-s visitará y vencerá al Leviatán, la serpiente polar y el Leviatán, la serpiente enroscada, y matará al dragón del mar”.

Los primeros cabalistas se referían al Teli por su nombre árabe Al Jaz´har que significa "nudo" o "nodo". Esto coloca a los Teli en el contexto astronómico de los nodos lunares, que en la astrología tradicional se llaman apropiadamente la Cabeza del Dragón y la Cola del Dragón. Estos nodos son los únicos lugares a lo largo de la eclíptica donde puede ocurrir un eclipse solar o lunar completo.

Hay dos puntos donde el plano de la eclíptica intersecta con el plano celestial, que son el punto de equinoccio de primavera y equinoccio de otoño. El punto del equinoccio de primavera se llama "nodo ascendente", o "cabeza de la serpiente", mientras que el punto del equinoccio de otoño se llama el "nodo descendente" o la "cola de la serpiente".

El equinoccio de primavera (la cabeza de la serpiente) se entiende por el cabalista Avrahám Abulafia como el "mérito", mientras que el equinoccio de otoño (cola de la serpiente) como la "responsabilidad". Curiosamente, el nodo de mérito es similar a la época de Pésaj que denota gracia mientras que el nodo de responsabilidad es paralelo a la hora de Rósh HaShaná que significa juicio.

Según algunos kabbalistas, la constelación de Draco es la serpiente del polo masculino y el círculo de la eclíptica es la serpiente circular femenino, como la mujer rodea al varón en unión marital.

Desde un punto de vista iniciático, ambos dragones / serpientes celestiales representan las ataduras del Universo manifestado, ambos están vinculados al Viaje Solar, ambos eclipsan el Sol físico, y ambos representan el principio cíclico de vida y muerte que debe ser trascendido por el iniciado aspirando a la devekut/unión con Di-s y la existencia inmortal. Ambos fueron demonizados hasta cierto punto por las doctrinas exotéricas y no iniciadas de la hegemonía religiosa y ambos deben ser asesinados por la Ascensión espiritual. 




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