LOS 7 CIELOS SEGÚN RABÍ AKIVÁ

LOS 7 CIELOS SEGÚN RABBÍ ÄKIVÁ

Por Kabbalah y Torah

Cuando ascendí al primer Hejál (Palacio), yo era un devoto (Jasíd); en el segundo palacio era un ser puro (Tahór); en el tercero sincero (Iashár); en el cuarto estaba unido a Di-s (Tamím), en el quinto mostré mi santidad, en el sexto dije la Kedushá (Kadósh, Kadósh, Kadósh) ante Aquel que habló y creó, a fin de que los ángeles guardianes no me hiciesen daño: En el séptimo palacio me mantuve erguido con todas mis fuerzas, mientras todo mi cuerpo temblaba y pronuncié la plegaria: “Loado seas Tú, el exaltado, loado sea el sublime en los aposentos de la Grandeza”.

1. Rabbí Äkivá dice que en el primer vestíbulo o Hejál (palacio) se encontraba en un estado de devoción jasídica. Es la instancia en la que se descorre el velo (Vilón) y se entra en el mundo del espíritu puro. Es un lugar donde ángeles y humanos pueden comunicarse libremente.

2. El segundo palacio es Tahór, estado de suma pureza, y el cielo es Rakía o firmamento. Aquí es donde reside el arcángel Gavri´el. Es el lugar o estado de conciencia donde los signos de los cielos son revelados a los profetas. Es el lugar del Espíritu Santo en el hombre, de Dáät en las Sefirót.

3. El tercer cielo es Shejakím. En él Rabbí Äkivá se encontró en una condición de Iashár o sinceridad. Es el lugar donde se produce el tiempo.

4. El cuarto cielo es Zevúl, donde hay plenitud o Tamím. Es un contacto directo con lo divino. Corresponde al arcángel Mija´el (Miguel) y allí se ubica la Jerusalén Celestial, lugar de encuentro de muchos mekubalím (cabalistas).

5. El quinto cielo es Maón o morada. Allí Rabbí Äkivá se encontró con los grandes arcángeles guardianes, como Sama´el y Tzadki´el.

6. El sexto cielo es Majón o el omnipresente. Es el espacio de seres más elevados, pertenece al Trono Divino o de la Gloria (Kavód) y los guardianes aquí son Domi´el y Kaftzi´el.

7. El séptimo cielo (Äravót) es la presencia del Creador.