SHEM 33: REVELANDO EL LADO OSCURO - יחו

 

Por Kabbalah y Torah en Expansión 

Nuestro propósito en la vida es encontrar la Luz que fue ocultada en el momento de la Creación. Ese propósito se puede cumplir si logramos ubicar el escondite, que es todos y cada uno de nuestros rasgos negativos.

 

Podemos arribar a este mundo bendecidos con una naturaleza 99.99% positiva, pero aún puede existir un rasgo negativo pequeño, casi microscópico, oculto en algún lugar dentro. Si lo ignoramos, la vida nos dará pequeños golpecitos en la cabeza. Si continuamos ignorándolos y nos preguntamos: ¿por qué yo?, los golpes se volverán más fuertes.

 

Cuando la luz del Sol brilla a través de las rendijas de una persiana, miles de partículas de polvo son visibles en los rayos de luz. Pero hasta que llegó la luz del Sol, no pudimos detectar el polvo y la suciedad que se arremolinaban en el aire.

 

La Luz de este Nombre trabaja de la misma manera. Cuando permitimos que esta Luz espiritual brille en nuestras vidas, revela cualquier rasgo egocéntrico que todavía mancha nuestra naturaleza. Activemos este Nombre cuando nos estemos preguntando a nosotros mismos: “¿Qué hice?”

 

MEDITACIÓN:

 

La Luz brilla. Reconocemos las fuerzas negativas aún activas dentro de nosotros. Nuestros impulsos reactivos ya no representan un misterio. Con el poder de este Nombre son historia.

 

“¡Cuán grades son Tus obras, oh HaShem! Muy profundos son Tus pensamientos”.

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