EL MAESTRO Y EL REY

 

Por Kabbalah y Torah en Expansión

 

Ieshaäiahu 11:2, 6a:

 

“Y reposará sobre él el espíritu de HaShem, espíritu de sabiduría y de inteligencia, espíritu de consejo, y de fortaleza, espíritu de conocimiento y de temor de HaShem... El lobo morará con el cordero” 

 

En este pasaje el profeta describe la venida de Mashíaj que llegará y nos redimirá rápidamente en nuestros días, destacando varios aspectos de las cualidades del Rey Mashíaj y su conducta.

 

Al principio, describe el nivel espiritual del propio Mashíaj: “Y reposará sobre él el espíritu de HaShem” y luego continúa describiendo su conducta: “Y estará impregnado del espíritu del temor de HaShem...”. ‘JaZaL’ (“nuestros sabios de bendita memoria”) interpretan (Sanhedrín 93b) esta frase en el sentido de que juzgará a los ‘Tzaddikim’ (“personas justas”) a través de su sentido del olfato.

 

Después, el versículo continúa: “El lobo morará con el cordero…”, indicando que la conducta de Mashíaj traerá consigo la revelación de la Divinidad en todo el mundo, no solo entre los humanos, sino también entre los animales y dentro de la esfera de los objetos inanimados, como continúa el pasaje, “porque la tierra estará llena del conocimiento de HaShem” (Ieshaäiahu 11:9). Incluso la tierra física se llenará del conocimiento de HaShem.

 

Pero, dado que “la tierra estará llena del conocimiento de HaShem”, ¿por qué será necesario un rey en esa era? Aparentemente, el propósito de un rey es imponer la ley y el orden; dado que toda la existencia estará impregnada del conocimiento de HaShem, parecería que tal imposición no será necesaria.

 

En resumen, la explicación del concepto es que la realeza se identifica con la cualidad de la exaltación, el concepto de que un rey es independiente y superior a su pueblo. Incluso las órdenes de un rey reflejan cercanía; el rey se acerca a su pueblo guiándolo según sus deseos.

 

La obediencia de sus súbditos a las órdenes del rey no surge porque conozcan y aprecien la razón de las mismas, sino más bien por temor y pavor al rey, como dicen ‘JaZaL’: “Su temor debe recaer sobre vosotros” (Sanhedrín 22a). Así, incluso la bondad que el rey brinda a su pueblo refleja su exaltación y distinción.

 

Esto refleja la diferencia entre la influencia de un maestro y la de un rey. Cuando un maestro influye en un alumno, se acerca a él, pues limita su propia comprensión a un nivel apropiado para el alumno, de modo que este pueda captar la idea. La influencia de un rey, en cambio, permanece separada del pueblo, por encima de su comprensión intelectual; esto se debe a que un rey comunica sus deseos como decretos, para ser aceptados por respeto reverencial, y no porque el pueblo los comprenda.

 

La fuente de estos 2 tipos de influencia que Mashíaj ejercerá, la de un rey y la de un maestro, se encuentra en la Torá, pues la Torá contiene paralelismos con ambas influencias. Hay ciertos conceptos de la Torá que han sido plasmados en una forma intelectual, similar a la influencia de un maestro. Sin embargo, la esencia de la Torá permanece por encima del intelecto, similar a la influencia de un rey.

 

En ‘Ïddán HagGueul´lá’ (“La Era de la Redención”), ambas dimensiones se manifestarán, y así Mashíaj será llamado tanto maestro como rey.

 

Mashíaj enseñará la Torá a todo el Pueblo de Israel y transmitirá una apreciación profunda de ‘Sodot HatTorá’ (“los secretos místicos de la Torá”). Debido a esta influencia, Mashíaj será considerado un ‘Rabbí’ (“maestro”).

 

Y, sin embargo, el propio Mashíaj comprenderá infinitamente más de lo que comunicará a través del intelecto. Esta dimensión de su ser también la transmitirá al pueblo, pero lo hará de manera abarcadora, como un ‘Mélej’ (“rey”) transmite influencia.

 

La palabra ‘Makkif’ (“circundante”), se refiere a una luz o forma de influencia demasiado poderosa para ser captada e internalizada, y por lo tanto se describe como Makkif. Sin embargo, la cuestión es que esta influencia abarcadora no es completamente trascendente. En cambio, aunque es demasiado poderosa para ser internalizada, sí influye en la persona.

 

Además, como es bien sabido, Mashíaj enseñará la Torá a la gente mediante la vista, una forma de instrucción que trasciende la comprensión ordinaria. Sin embargo, la influencia que ejercerá como rey es tan elevada que ni siquiera puede revelarse mediante la influencia trascendental de la vista. Y, sin embargo, dado que Mashíaj también servirá como rey, revelará incluso estos asuntos al Pueblo de Israel. Su revelación, sin embargo, será de carácter ‘Makkif’ (“abarcador”).

 

Si quieres seguir aprendiendo e ingresar a nuestro grupo de estudio escríbenos un sms al chat de la página de Facebook o al email: kabbalahytorah7@gmail.com

 

Gracias por apoyar y darle continuidad al proyecto de Kabbalah y Torah en Expansión

DONAR - TZEDAKÁ