RIQUEZA - 3 Por Kabbalah y Torah en Expansión Una persona que ama a HaShem en su comida, bebida y otros placeres físicos merece sostener a muchas naciones. Quien desprecia el dinero merece una larga vida. El que busca tesoros acelera su propia muerte. Quien no ha rectificado los pecados de su juventud se vuelve pobre. Una persona que lucha día y noche para ganarse la vida pero aún no tiene lo suficiente puede rectificar esto acercando a la gente a HaShem. En cualquier cosa que hagas, pídele al ‘Tzaddik’ (“persona justa”) que ore por ti. La ‘Simjá’ (“alegría”) constante es una ‘Segul´lá’ de ‘Hatzlajá’ (“éxito”). Quien hace del Nombre del Cielo un compañero en su angustia pidiendo la misericordia de HaShem, su sustento se duplica, y éste llega volando a sus manos como un pájaro. Por el pecado de no diezmar los productos de la Tierra de Israel, se pierden salarios y la búsqueda de medios de vida por parte de la gente no tiene